Desde el punto de vista estético los dientes mal alineados (“dientes chuecos”) además de dar una imagen poco estética pueden ser más susceptibles a la aparición de caries, formación de placa y cálculo dental ya que el acceso a la higiene se dificulta.
Si presentas alguno de estos síntomas, lo más probable es que necesites tratamiento de brakets
1. Dientes mal alineados
2. Espacios muy grandes entre los dientes (diastemas)
3. Dientes ausentes
4. Dientes con desgastes
5. Dolor en la articulación temporo mandibular
6. Problemas para abrir o cerrar
7. Disarmonía entre los huesos maxilares (mandíbula o maxilar superior con sobrecrecimiento)
Realmente la mejor manera se saber si necesitas brackets es acudir con un ortodoncista, quién evaluará tu situación y determinará cuál es el mejor tratamiento para ti.
Los brackets son pequeños arquitos de alambre que se deslizan sobre unos soportes metálicos, ubicados en cada diente, con el fin de moverlos a su posición correcta. El especialista al que acudas determinará el tiempo que debes usar los brackets.
Un tratamiento de ortodoncia puede durar entre uno y tres años, aunque algunas malas posiciones dentales pueden corregirse en solo unos meses, puede ser que los días posteriores a tu ajuste, tengas alguna incomodidad debido a que los movimientos que realizan los brackets en tus piezas dentales.
Tras finalizar el tratamiento de ortodoncia, al obtener una bonita y sana sonrisa, podemos afirmar que aún en sí, el tratamiento, no ha finalizado del todo: comienza la fase de la retención. Los retenedores de ortodoncia se colocan al finalizar tu tratamiento para que los dientes no vuelvan a moverse.
El retenedor de ortodoncia es un dispositivo, bien sea fijo (en la parte interna de los dientes delantero) o removible (que se coloca para dormir) que mantiene los dientes en la posición en la que terminaron la ortodoncia.
Mantener unos buenos cuidados y conservar los retenedores es fundamental si queremos lucir una sonrisa bonita, estética y funcional durante mucho tiempo.
- Los ortodoncistas aconsejan retirar y guardar los retenedores en cada comida, tanto por higiene como por comodidad.
- se recomienda limpiarlo con un cepillo específico o bien sumergir los aparatos en sustancias como agua con bicarbonato de sodio.
Por lo general, la recidiva se da durante los primeros 6 a 10 meses después de quitar los brackets, por lo que los retenedores deben usarse todo el tiempo durante ese periodo.
Precisarás retenedores dentales de manera permanente para mantener la alineación de los incisivos y evitar que los dientes se muevan. Los retenedores fijos, como hemos dicho no molestan y ni te das cuenta que los tienes. Los retenedores removibles se deben llevar de manera casi constante durante los 3-4 primeros meses. Después de ese tiempo, la ortodoncista te puede indicar que lo uses sólo por la noche.
Los retenedores pueden llegar a romperse, perderse o despegarse. En esos casos, debes acudir a tu ortodocista para hacerte uno nuevo. Por lo que se sugiere acudir a revisiones cada 6 meses.